Chiapa de Corzo, somos el corazón de Chiapas

Otras Tradiciones

Semana Santa

Como todo pueblo de influencia católica, Chiapa de Corzo lleva a cabo una serie de festividades en la Semana Santa, que inician desde el miércoles de ceniza hasta completar la cuaresma, con los rituales católicos y el carnaval pagano, prosiguiendo los viernes con las celebraciones del Señor de las Ampollas, Señor de la Agonía, Señor del Pozo, Señor de Acapetahua, Señor de la Misericordia, Señor de los Milagros, hasta culminar con las solemnes procesiones el Viernes Santo.

El Jueves Santo tiene lugar una celebración ancestral: los Chamales, ofrendas florales circulares con diversas figuras, acompañadas de cascadas y tiras de Flor de Mayo que adornan el altar del Cristo crucificado el Viernes Santo.

La palabra Chamal deriva de “chimali” (náhuatl), que significa “escudo”. Se elaboran con hojas de tempisque, chompipe, hojitas moradas (cucarachas) y flor de mayo, utilizando un fondo blanco a base de la raíz del lirio denominada “palenque”. En el Chamal se plasman figuras que representan elementos cósmicos, como el sol en sus diferentes puestas.

También se elaboran ramilletes o “joyonaqué” (en zoque, “flor costurada”) con dibujos de estrellas, gallos, palomas y remolinos. La hechura de estas ofrendas es apoyada por maestros zoques (joyonaqueros o ramilleteros) de Tuxtla Gutiérrez y San Fernando, y por chiapacorceños que han aprendido la tradición. Al finalizar, los ramilleteros entregan las ofrendas y realizan el ritual de bendición, rociando agua en dirección a los cuatro puntos cardinales como petición de agua para el ciclo agrícola.

Otra ofrenda del día son las cruces de carrizo o cañillas, hechas con flor de coyol, cubiertas por hojas de tempisque y flor de mayo, y adornadas al centro por un chamal. Dos familias que mantienen la tradición son Gómez Nigenda y Cameras Ocaña, de los barrios de San Antonio Abad y San Pedro.

Desde la mañana del Jueves Santo, vecinos llevan canastos de flor de mayo y flor de coyol para ensartar las tiras y cascadas que adornarán el altar. Para el Viernes Santo por la mañana se alistan varas de bambú que sostendrán las tiras de flor de mayo durante la procesión hacia el Templo de Santo Domingo de Guzmán, donde se prepara el altar y se realiza el viacrucis y la ceremonia de crucifixión.

Los Alférez

El día 8 de agosto, en la explanada del Templo de Santo Domingo de Guzmán, se celebra el combate entre Alférez y Nahuarés, los alférez visten con una camisa amarilla y pantalón rojo asemejando a los soldados españoles que defendían a la Corona (de unos años a la fecha se pintan la cara y utilizan un penacho en la cabeza, lo que ha causado confusión debido a que con esos atuendos asemejan más a los nativos), los Nahuaré que en lengua chiapaneca significa “máscara de madera”, representan a los nativos vestidos de Parachicos (con máscara de palo).

Esta representación simboliza la batalla entre españoles e indígenas en la época de la conquista. El combate se representa con el choque de machetes y se culmina con un recorrido a galope.

El Calalá (Danza del Venado)

El calalá o danza del venado es de origen prehispánico, la danza se usaba para espantar al mal y pedir una buena cosecha. Se lleva a cabo durante las festividades de Corpus Christi (Santísimo Sacramento del Altar). Producto del sincretismo religioso y de manera ritual, es escenificada el día de Corpus Christi en tres pueblos de Chiapas: Chiapa de Corzo, Acala y Suchiapa. Estas poblaciones tienen en común que provienen de la cultura de los chiapanecas, de manera que comparten costumbres y tradiciones. Se realiza los jueves de corpus, el Corpus Christi es el jueves que sigue al domingo de la Santísima Trinidad, que a su vez, es siempre una semana después del domingo de Pentecostés.

En esta danza intervienen personajes como el Calalá (Venado), el Gigantillo, Quetzalcóatl (la serpiente emplumada), de la misma manera hay una comparsa de tigres y chamulas estos últimos llevan la cara pintada con tizate, en su mayoría son niños, también participan las Reinitas (que son las abejas que rodeaban el panal) las cuales llevan ofrendas al Santisimo Sacramento a la Cofradía.

Los participantes de la danza del Calalá visten tocados color azul y adornan sus cabezas con paliacates para identificarse con la usanza de los pueblos originales de la depresión central de Chiapas. Esta festividad tiene su punto culminante el jueves de Corpus. El misterioso Tigre Nambusheli. Este personaje es escoltado por el colmenero, persona que toca un silbato o “gallito”, en su camino donde venera y agradece.

La Vaquita

Representando al ganado sacrificado en los tiempos de Doña María de Ángulo, un grupo de personas torean por las calles a la "Vaquita", que consiste en un disfraz realizado con tablas y telas simulando la forma de una vaca. Salen los días de la Fiesta Grande de Enero.

Fiestas de barrio

Chiapa de Corzo desde su fundación, dividió los asentamientos en barrios, regularmente nombrados con el título de un santo, en ellos se guardan tradiciones y costumbres desde tiempos de la colonia. Por lo cual actualmente, se realizan festividades en los barrios de San Antonio Abad, San Jacinto, Santo Tomás, San Miguel, Santa Elena, San Lorenzo, San Gregorio, San Vicente, San Pedro y El Calvario.

Los Faroles

Derivado de las festividades alusivas a la conmemoración de la batalla del 21 de octubre de 1863, desde hace años, el pueblo chiapacorceño diseña y construye faroles con diversos materiales que van desde el carrizo, madera, papel cascarón, entre otros, forrados con papel de china, nylon, acetatos, cristales, etc., para iluminar las calles de la Heroica Ciudad, rememorando el apoyo del pueblo a los héroes en aquel glorioso acto, siendo el punto de reunión la Presidencia Municipal la noche del 20 de octubre, en compañía de autoridades municipales, se recorren cada uno de los fuertes de la gloriosa batalla: Fuerte de la Piedra Orcada, Fuerte Zaragoza (templo de San Sebastián), Fuerte Independencia (iglesia de San Gregorio) y Fuerte Libertad (iglesia del Señor del Calvario), en cada uno de ellos se lee una semblanza de lo ocurrido en aquella batalla, para culminar en la iglesia del Señor del Calvario, en donde se realiza el tradicional concurso de Faroles, en donde se premia a los más vistosos, grandes y coloridos.

Todos los Santos

Los días 31 de octubre, 1 y 2 de noviembre, como en todo el país, en Chiapa de Corzo se celebra la venida de los a la tierra de los familiares y seres queridos fallecidos o fieles difuntos como se les denomina. Cada familia de acuerdo a sus posibilidades, prepara minuciosamente los manjares favoritos del difunto y lo colocan alrededor del altar familiar y de la tumba, adornados con numerosas flores “de muerto” o cempasúchil y de objetos artesanales y dulces típicos con formas de calavera, ataúdes, cruces entre otros.

Se tiene la creencia que el día 31 de octubre al medio día, vienen las “almas chicas” (de niños y jóvenes), regresando al cielo el mediodía del 1 de noviembre, hora en la cual bajan a la tierra las “almas grandes” (de adultos), quienes se regresan al cielo al mediodía del 2 de noviembre.

Las noches de 31 de octubre y 1 de noviembre, se acostumbra acudir al panteón para velar a los difuntos en su tumba, también es común escuchar los sonidos del tambor y pito, marimba y música de fiesta por diversas tumbas.

Topada de la Flor

Los días del 14 al 21 de diciembre, un grupo de "Floreros" parte de Chiapa de Corzo, para traer la Flor para adornar el nacimiento del Niño Dios, pasando por las comunidades de Mitzitón en el Municipio de San Cristóbal de las Casas, Navenchauc y Multajó del municipio de Zinacantán, y las rancherías del Rodeo y el Nanchi en el municipio de Chiapa de Corzo, para culminar el recorrido el día 21 en la denominada "Topada de la Flor", que es un día de campo y fiesta por el regreso de sus familiares y amigos, muchas familias acompañan a los floreros en todo el recorrido.